El mayo del 68 se caracterizó por una sucesión de huelgas y
protestas que partieron de los movimientos estudiantiles y que se contagió a
los sindicatos obreros generando una protesta jamás vista.
Estos acontecimientos comenzaron el 3 de mayo, cuando un
grupo de estudiantes se reunió en la plaza de la Sorbona, para protestar en
contra del sistema universitario. Como se reunieron tantas personas tuvo que
acudir la policía, que detuvo a una serie de estudiantes.
Como consecuencia de los arrestos las manifestaciones fueron
en aumento, siendo miles de estudiantes y trabajadores los que protestaban y
hacían huelga. La policía, bajo las órdenes de Charles de Gaulle, estaba
presente en todas las manifestaciones y provoco muchos enfrentamientos, que
generó una batalla campal. Como resultado se generó una huelga general de
estudiantes y más de diez millones de trabajadores, lo que hizo que el país se
paralizara completamente.
Se consiguió disolver las manifestaciones prometiendo
mejores salarios y condiciones para los trabajadores.